Esta página esta dedicada a analizar desde mi punto de vista lo que ocurre en CUBA, en MIAMI y en otras partes del mundo
domingo, 1 de marzo de 2009
LOS HAITIANOS
Una de las comunidades radicadas en Miami, más defavorecidas, es la comunidad haitiana. Practicamente permanecen en el olvido, tal vez porque casi nunca sus miembros aparecen en los titulares de la prensa, en las páginas rojas, como hacedores de delitos contra la sociedad. Todo lo contrario, el haitiano al llegar a Estados Unidos, se dedica a superarse, aprende rápidamente el idioma y trabaja como no lo hacen otras comunidades. Así, si vamos a un hospital nos encontramos que la mayoría de los enfermeros, y trabajadores de servicio son haitianos, ellos no se destacan mucho en los negocios pero si en los trabajos técnicos. Actualmente hay una campaña para deportar a mas de 600 haitianos. Creo que la comunidad de Miami, debe manifestarse en apoyo a estos hermanos, que aunque no hablen español, son tan latinos como los nicas, hondureños, cubanos, etc.
Los haitianos por su parte cometen un lamentable error al compararse con los cubanos, que según ellos son recibidos con alfombra roja cuando llegan a Estados Unidos. Es lo mismo que piensan los dominicanos, y mexicanos, pero es que las condiciones son diferentes, en Cuba existe una tiranía, que no existe en otros países, ni siquiera en Haití.
Es una pena que Haití como nación no logre prosperar, es una pena que el apoyo internacional se limite al envío de alguna ayuda material y del envío de tropas de paz. Haití tiene material humano para desarrollarse y salir de la miseria. Tal vez solo necesita un empujoncito de los países más favorecidos de la región. Pero mientras esto ocurre, y mientras esperamos un despunte económico en la economía más pobre del continente, debemos solidarizarnos con aquellos hermanos que han arriesgado su vida y han llegado a las costas floridanas, para emprender una vida más digna y más plena. Ojalá este gobierno muestre compasión con nuestros hermanos y no los envíen de nuevo al sufrimiento, al hambre y a la desesperanza.
Un abrazo a los hermanos haitianos, y recuerden que los cubanos no somos sus enemigos.
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